Este maravilloso libro, humilde y lleno de encanto e inteligencia, nos habla de la felicidad y de la extrañeza de ser padre e hijo a la vez: el narrador se sorprende con el pensamiento mágico de su hija, se maravilla ante sus juegos y progresos con el lenguaje y se acerca a las grandes preguntas: ¿qué significa estar en el mundo? ¿Qué es la vida? ¿Y por qué el carrito del bebé se estropea siempre cuando más lo necesitamos?
Para David Wagner, el concepto de hijo es impensable sin el concepto de padre; de hecho, es precisamente la integración en una sucesión de generaciones lo que distingue esa situación especial de la infancia. Cuando miras a tu hijo se despiertan recuerdos del hijo que alguna vez fuiste y sobre el que tus padres u otros mayores te han hablado. En Cosas de niños, Wagner ahonda en los pequeños rituales y procesos que representa a diario ese hijo (en su caso, una niña); en tales rituales se reflejan las modas del presente inmediato, pero también hay ecos de la infancia del padre e incluso de los abuelos. Y «ahondar» significa no sólo contar, narrar, sino también meditar, reflexionar. Lo que se hace aquí casi en voz alta, compartiéndolo todo, como en una conversación, con nosotros, los afortunados lectores.
«Un libro maravilloso. Un padre describe y admira a su hija, sus ocurrencias, sus asociaciones de ideas, sus experiencias reveladoras, sus exigencias inmediatas y su paso a la independencia, mientras él, gracias a ello, se sumerge en el recuerdo una y otra vez». Andreas Schäfer, Tagesspiegel.
«Cuánta belleza habita en las cosas más pequeñas, en los hechos más simples, algo que Wagner muestra en pocas palabras, sin caer en la cursilería». Hamburger Abendblatt.
«Un libro pequeño que desprende un encanto enorme». Sandra Kegel, Frankfurter Allgemeine Zeitung.
«Melancólico en ocasiones, resulta increíblemente divertido en muchos momentos», Magazin.
«Inteligente, sencillo y entretenido». Susanne Mayer, Die Zeit.